jueves, 13 de enero de 2011

FINALIDADES Y OBJETIVOS DE LA EDUCACION ADVENTISTA


Todo centro de educación debe tener finalidades concretas y objetivos definidos que marquen la ruta a seguir, a fin de educar a niños y jóvenes de acuerdo a la filosofía de la educación adventista.

El éxito de una escuela o colegio depende, en gran medida, de la orientación que se imprima en todo su proceso escolar.

Toda institución nuestra, desarrolla una educación integral, teniendo como centro al alumno, a fin de obtener resultados de acuerdo a los ideales que se ha propuesto.

Conviene que al comenzar un nuevo año lectivo, se reflexione sobre los objetivos y finalidades que jerarquizan el tipo de educación que se aplica en nuestros establecimientos:

1. Procura una educación integral. "Abarca todo el ser y el período de la existencia accesible al hombre." (La Educación, pág. ll).

2. Para que esa educación integral se produzca, habrá un "desarrollo armonioso de las facultades físicas, mentales y espirituales." (Idem, pág. 11).

3. El que recibe una educación adventista, notará que ésta "prepara al estudiante para el gozo de servir en este mundo y para un gozo superior proporcionado por un servicio más amplio en el mundo venidero." (Idem, pág. 11).

4. Pronto se advertirá en todo establecimiento el gran objeto de la educación, que es el gran objeto de la vida. "La obra de la redención debía restaurar en el hombre la imagen de su Hacedor, hacerlo volver a la perfección en que había sido creado, procurar el desarrollo del cuerpo, la mente y el alma, a fin de que se llevase a cabo el propósito divino de su creación." (Idem, pág. 13).

5. Al tener un inigualable fundamento en materia de educación se logra el propósito. "El amor, base de la creación y de la redención, es el fundamento de la verdadera educación." (Idem, pág. 13).

6. gPor qué nuestro sistema de educación siempre estará en primer lugar? Porque, "Para obtener una educación digna de tal
nombre debemos recibir un conocimiento de Dios como Creador y de Cristo como Redentor." (Idem, pág. 15).

7. Hay una meta a alcanzar. "El blanco a alcanzarse es la piedad, la semejanza a Dios." (Idem, pág. 16).

8. La educación adventista es progresiva, de permanente superación. "El ideal que Dios tiene para sus hijos está por encima del más elevado pensamiento humano. Ante el estudiante se abre un camino de progreso continuo. Tiene que alcanzar un objeto, lograr una norma que incluye todo lo bueno, puro, y noble.. (Idem, pág. 16).

9. El tipo de educación cristiana fue dado por Dios como un modelo. "El sistema de educación instituido al principio del mundo, debía ser un modelo para el hombre en todos los tiempos." (Idem, pág. 17).

10. La razón de que la educación cristiana es superior, es que tiene un fundamento insustituible. "En el sentido más elevado, la obra de la educación y de la redención son una, pues tanto en la educación, como en la redención, "nadie puede poner otro fundamento fuera del que está ya puesto, el cual es Jesucristo." (Idem, pág. 27)

11. La educación que se desarrolla en nuestras instituciones adventistas, cultiva un espíritu peculiar: el de servir. Se nos dice: "Más que ningún otro agente, el servir por amor a Cristo en las cosas pequeñas de la vida diaria, tiene poder para formar el carácter y para dirigir la vida por el camino del servicio abnegado." (Ministerio de Curación, pág. 312).

12. Al producirse el maravilloso proceso de la educación trae como resultado la estructuración del carácter. "La más alta educación es la que imparte conocimiento y una disciplina que conduce a un mejor desarrollo del carácter y prepara al alma para aquella vida que se mide con la vida de Dios." (Consejos para los Maestros, pág. 37).

13. La educación integral no sólo desarrolla la mente y el alma, sino también la mano. "Mientras asisten a la escuela, los jóvenes deben tener la oportunidad de aprender el manejo de las herramientas;" (carpintería, imprentas, encuadernación, horticultura, fruticultura, agricultura, construcción, trabajos domésticos, etc.) (La Educación Cristiana, págs. 279-282). "El cerebro y los músculos han de ser cargados proporcionalmente si se quiere conservar la salud y el vigor." (Idem, pág. 283).

14. Ese proceso integral incluye también la actitud misionera fomentada en la misma institución. Se afirma que: "Nuestras
escuelas son el medio especial que el Señor tiene para preparar
a los niños y jóvenes para la obra misionera." (Idem, pág. 56).

"La obra de nuestras escuelas superiores y preparatorias debieran fortalecerse de año en año, porque en ellas se ha de educar a nuestros jóvenes para que vayan a prestar servicio al Señor como obrero eficiente." (Idem, pág. 433).

15. Hay un modelo a seguir: "Nuestras escuelas tienen que ser como las escuelas de los profetas. En ellas se han de estudiar fervorosamente las verdades de la Biblia. La mente de los estudiantes adquirirán un carácter más elevado, y contemplando el carácter de Jesús procurarán asemejarse a él." (Idem, pág. 353).

16. En el aprendizaje ocupará un lugar destacado el lenguaje, ya que "El principal requisito del lenguaje es el de ser puro, bondadoso y veraz, 'la expresión externa de una gracia interior'. Dios dice en Filipenses 4:8 "Cuantas cosas sean conforme a la verdad, cuantas sean honrosas, cuantas sean justas, cuantas sean puras, cuantas sean amables, cuantas sean de bueno nombre; y si hay otra virtud alguna, y si hay otra cosa alguna digna de alabanza, pensad en las tales cosas y si tales son los pensamientos, tal será la expresión." (La Educación, pág. 230).

17. La educación adventista abarca también el aspecto de la apariencia exterior, pues "No puede ser completa ninguna educación que no enseñe principios sanos en cuanto a la indumentaria. Sin tal enseñanza, la obra de la educación es a menudo retardada y pervertida. El amor al vestido, la devoción a la moda, se cuentan entre los más formidables rivales y más efectivos obstáculos del maestro. El amor a la ostentación produce extravagancia y en muchos jóvenes mata la aspiración a llevar una vida más noble." (Idem, págs. 240-241).

18. También la educación incluye la práctica de principios éticos, morales y sociales. "...Las instituciones del saber debieran producir hombres fuertes para pensar y obrar, hombres que sean amos y no esclavos de las circunstancias, hombres que posean amplitud de mente, claridad de pensamiento y valor para defender sus convicciones." (Idem, pág. 15).

19. Uno de los blancos más nobles es el de plasmar en los educandos una personalidad integral. "La edificación del carácter es la obra más importante que jamás haya sido confiada a los seres humanos y nunca antes ha sido su estudio diligente tan importante como ahora" (Idem, pág. 221). "Conservad la personalidad que Dios os ha dado." (Mensajes para los Jóvenes, pág. 191).

20. Toda institución adventista también vela por el desarrollo cívico y patriótico de su alumnado. "Vi que en cada caso es nuestro deber obedecer las leyes de nuestro país..." (Joyas de los Testimonios, tomo 3, pág. 49). Las Escrituras aconsejan: Honra al rey."

21. Cada escuela o colegio procura impartir enseñanza positiva referente a la salud y al cuidado del cuerpo, al considerarlo como "Templo del Espíritu Santo." (1 Cor. 6:19).

"Puesto que la mente y el alma hallan expresión por medio del cuerpo, tanto el vigor mental como el espiritual dependen en gran parte de la fuerza y la actividad física; todo lo que promueva la salud física, promueve el desarrollo de una mente fuerte y un carácter equilibrado. Sin salud nadie puede comprender distintamente, ni cumplir completamente sus obligaciones para consigo mismo, con sus semejantes, o su Creador. Debiera cuidarse por lo tanto tan fielmente la salud como el carácter." (La Educación, pág. 191).

El fiel cumplimiento de estos objetivos y finalidades conducirán siempre a nuestras instituciones, en todos sus niveles, al éxito más completo.

"Nuestra consigna debe ser: Hacia adelante, siempre hacia adelante" (Joyas de los Testimonios, tomo 3, pág. 220).

Por

Guillermo Krieghoff D.

Fuente:http://www.pmministries.com

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